Los Fantasmas y María Sangüesa. Por : Alena Collar

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Las historias de fantasmas  tienen una larguísima tradición literaria, en los varios géneros que las han desarrollado.

Hablo de géneros porque dentro del amplio abanico que este tipo de narraciones ofrece, podrían delimitarse el típico relato de terror, el de suspense o intriga , lo que podría llamarse el relato de elementos mayoritariamente sobrenaturales, y finalmente el relato en el que el elemento que aparece bajo la catalogación de “fantasma” es una narración en la que el espíritu está por así decir, insertado de modo natural en el texto; es decir, que sí es protagonista pero que no cumple los requisitos de un relato de esas características. De modo que el relato vive por sí mismo, pero con el fantasma dentro-permítaseme la broma léxica-.

De este estilo es el libro que, con un acierto enorme, publica María Sangüesa, bajo el título Del Más Allá, Cuentos de Fantasmas.

 

  (Alena. Collar )

 

 

 

 

 

 

 

 

Los Fantasmas y María Sangüesa.  Por : Alena Collar.

 

 

 

María Sangüesa por tanto, es primero narradora, y en segundo lugar, nos habla de fantasmas que aparecen en sus relatos. Y esto, que parece algo nimio, no lo es, porque prima en esta condición el hecho diferencial de que lo que narra la autora es una historia que se mantiene con interés, con un lenguaje naturalísimo y que atrapa, con personajes que viven por sí mismos, y que por diversas circunstancias, se encuentran frente a un ser de estas peculiares condiciones.

 

 

 

 

Decía que este libro se publica con un acierto enorme, porque viene a demostrar algo que a veces no es evidente; que para escribir sobre un tema determinado, no solo hay que saber sobre ese tema determinado, sino que en primer lugar hay que tener calidad como escritor.

Cuentos sobrenaturales hay muchos, cuentos de fantasmas o sobre ellos, también, lo difícil es encontrar cuentos interesantes en los que aparezcan fantasmas. Me explicaré: hay una tendencia en la literatura fantástica, que se empeña en considerar que cuanto más miedo, más sangre, más horrores y más carnaza se muestren al lector, más calidad tendrá el presunto cuento. Pero nada demuestra que sea cierta la dualidad “a más horror mejor cuento”. Sí demuestra, aunque se salga de este comentario, que a más morbo más compras de quien no quiere leer libros de calidad sino una sección de sucesos de doscientas páginas.

María Sangüesa ha publicado un excelente, entretenidísimo, ameno y amable, libro. Amable porque sus fantasmas no asustan, porque se nos hacen queribles, y, curiosamente, absolutamente reales. Pero además lo ha hecho excelente porque utiliza todos los recursos de estilo, de lenguaje y de estructura del cuento de modo que consigue una obra coherente y que, en cada relato, se cierra en su propio espacio y tiempo.

Nos gustaría que este libro circulara; se vendiera, se leyera y se difundiera; los fantasmas que habitan en el libro de la autora, se lo merecen. Y ella también.

 

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